Los sindicatos UGT, CC.OO. y CGT han convocado una huelga indefinida a partir de este lunes para los trabajador@s de limpieza del Hospital Ramón y Cajal en protesta por los planes de reestructuración de plantilla que planea la empresa adjudicataria, CLECE (perteneciente al Grupo ACS de Florentino Pérez), y que suponen según sus cálculos la salida de 63 empleados.
Así, lo han indicado el responsable de limpieza de la Federación de Servicios Privados de CC.OO. de Madrid, Julio Gómez, y la portavoz de limpieza de FeS-UGT Madrid, María Jesús Vivar, quienes han subrayado que los paros son de carácter indefinido.
Los servicios mínimos fijados para los paros son del 64,4% durante el turno de mañana (78 empleados), del 77,63% por la tarde (59 personas) y del 88,89% en el caso de la noche (8 personas).
Los representantes sindicales han explicado que el motivo de la huelga es la protesta por los planes de reestructuración de plantilla que piensa acometer CLECE y que, según los cálculos del Comité, supondría tener 63 o 64 trabajadores menos para realizar el servicio.
El motivo, según remarcan, es que la empresa sostiene que el presupuesto de la adjudicación del servicio obliga a realizar ese ajuste de plantilla y ha agregado que, hasta el momento, se han desvinculado cerca de 30 empleados.
En este sentido, han recordado que la plantilla que fue subrogada por CLECE en octubre comprendía unos 380 trabajadores en el caso del hospital Ramón y Cajal y que ahora, según las estimaciones de los sindicatos, rondaría por debajo de los 350 empleados.
Al respecto, el representante de CC.OO. remarca que los planes de ajuste suponen una reestructuración «muy grande» que puede mermar la calidad del servicio y poner en riesgo el cumplimiento de las mínimas condiciones de higiene y salubridad exigidas para un hospital de las dimensiones del Ramón y Cajal.
Gómez también ha indicado que la reestructuración también va a afectar a las condiciones laborales recogidas en convenio colectivo, con especial mención al caso de la organización de las vacaciones de la plantilla. Por ello, espera que la huelga sirva para lograr una solución y que la empresa reconsidere su postura.
Por su parte, la representante de UGT denuncia que estas medidas «reducen la calidad del servicio» y «ponen en riesgo» la salud de los ciudadanos pues la higiene de dependencias como quirófanos puede verse «seriamente reducida».
El director gerente del Hospital Ramón y Cajal, Javier Maldonado, ha afirmado que el centro está funcionando con total normalidad debido al cumplimiento de los servicios mínimos decretados y, en consecuencia, ha lanzado un mensaje de «tranquilidad» para usuarios y pacientes.
Fuente: periódico digital 20minutos.es.
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